El sexto éxito será la felicidad de tus propios colaboradores. El mayor capital de las empresas no es el dinero, son las personas que participan en él, desde el fundador o fundadores hasta todos los colaboradores. Y este gran tesoro debe ser protegido, formado, motivado, evaluado y promovido.
Aprender, adaptarse, innovar son procesos que nunca deben apartarse de ninguna empresa y que generan éxito empresarial en el largo plazo. Buscar el éxito integral debe ser el primer objetivo de todos quienes participan en una empresa porque así cada uno encontrará su propia realización.
Todo lo expresado anteriormente se puede aplicar sin dudarlo al sector del lujo sin la menor restricción, porque lo que más caracteriza a las marcas de lujo se puede resumir en lo siguiente: veracidad y responsabilidad.
Pero ¿cómo triunfar en el sector del lujo? Pues eso lo diremos con: veracidad, responsabilidad, estrategia, publicidad, calidad y precio. Todos estos puntos deben cumplirse y cuidarse para fidelizar al cliente, de lo contrario caerá en el mayor descrédito.
La veracidad es un valor moral positivo muy apreciado en las empresas de lujo porque la veracidad de los productos o servicios que producen está acorde con los resultados apreciados por los consumidores. La veracidad que ofrecen las marcas de lujo implica la capacidad de colaboradores altamente capacitados para generar productos o servicios de alta gama.
La responsabilidad es uno de los valores más fuertes e importantes de las empresas de lujo ya que les ayuda a alcanzar sus objetivos y metas mediante el cumplimiento de deberes, obligaciones, acciones o estrategias para ofrecer productos y servicios de calidad a sus consumidores.
